Economía

 La población de Santa Elena, alcanzó en los años veinte del siglo XX mas de dos mil quinientos habitantes (minería, construcción del ferrocarril y trazado de la carretera pudieron intervenir en ello), se mantenía en menos de dos mil a mediados de siglo y solamente supera algo el millar desde 1970. El envejecimiento observado en la población propietaria de las explotaciones agrarias no se reproduce en el resto de la masa social; la población joven casi duplica a la jubilada, y casi el 40% del total de los habitantes (la mitad de los mayores de edad) están activos: Entre propietarios y obreros eventuales, un centenar de ellos se ocupan de tareas agrarias (incluida la silvicultura, apicultura y la ganadería); otros tantos trabajan entre los servicios, sobre todo la hostelería y la industria, si bien estos últimos lo hacen especialmente en otros municipios cercanos, en un núcleo urbano donde los establecimientos industriales son los restos de las explotaciones mineras del plomo, taller de elaboración de maderas, talleres de forja y la industria alimentaría solamente esta representada por la elaboración de pan y pasteles.  

Solamente 265 hectáreas (2,7% de la superficie) del término aparece cultivada (tanto como la zona de los incendios o como el total de roca desnuda existente), casi todo en torno al caserío de la localidad, que está rodeada (salvo por el norte) de labores de regadío tradicional, en la cabecera del arroyo de Las Huertas, flanqueadas a su vez por olivares. Fuera de allí solamente se observan los olivares de las cercanías y los recientemente plantados entre las encinas.  

Un centenar de personas son titulares de explotaciones agrarias, de las que algo más de la mitad dicen dedicarse a esa tarea en exclusiva, según el último Censo Agrario. Y más de la mitad, también son personas en edad de jubilación. No obstante, existen empresas agrarias gestionadas con mentalidad empresarial, en la zona de Miranda del Rey o los parajes de Nava Martina y el Santo. El tamaño de la cabaña ovina, con mas de siete centenares de "unidades ganaderas" es importante. Pero la transformación de los productos agrarios es escasa en el municipio.   

La Apicultura también tiene su apartado en la localidad, siendo varias las explotaciones de tipo familiar que se dedican a la gestión de las colmenas para la extracción de la Miel, si bien la comercialización viene a ser casi inexistente siendo otras empresas las que tienen otras redes de distribución mayores que desde Linares, surten al mercado de la deliciosa Miel de Despeñaperros.   

Algunos lugares y dehesas en el término municipal, son el ámbito natural del ganado vacuno de cría extensiva, base de la ganadería de lidia, también existente en varias explotaciones de la localidad.  

También son importantes, los beneficios aportados durante la época de la recolección de setas, concretamente los "Nizcalos" (Lactarius Deliciosus) conocidos en la localidad con el nombre de "Guizcanos" los cuales son bastante abundantes durante finales de Octubre, Noviembre y el mes de Diciembre antes de que el frío y las heladas, acaben con la temporada. 

Son numerosas las personas, a veces los componentes de familias enteras que se desplazan a los pinares de los alrededores, y de todo el Parque Natural, para recolectar los Nizcalos, (Lactarius Deliciosus) los cuales a su vuelta son llevados para venderlos a los compradores que vienen desde distintos puntos del país, siendo las comunidades de Alicante y Cataluña las que mas aprecian este tipo de seta. (Haz clic sobre las fotos para verlas mas grandes)  

(Nuestro agradecimiento a las personas que nos han dejado tomar las fotos)

        En ocasiones, incluso vienen hasta Santa Elena, familias y particulares desde estas comunidades, desplazándose algunos días en la temporada para hacer ellos mismos la recolección y llevárselos o para comprar en los puestos donde se compra y se vende el famoso "Guizcano"